Algunas marcas anuncian a bombo y platillo ciertos productos tipo calefactores como grandes revolucionarios del sector, afirmando que pueden calentar una estancia o habitación en pocos instantes a cambio de un bajo consumo.  Sin embargo, ¿qué credibilidad le podemos dar a esto? A continuación, vamos a tratar de responder a la gran pregunta sobre si merece la pena encender la calefacción central de gas para calentar toda la casa, o bien es mejor utilizar radiadores o calefactores eléctricos por habitación.  A primera vista, la segunda opción puede parecer una mejor idea. Puedes colocar el calefactor junto a tu escritorio si trabajas desde casa, o cerca del sofá cuando te relajas por la noche. Tan pronto como esté caliente, puedes apagarlo y encenderlo según tu necesidad.  Pero como sucede con todo, existen situaciones en las que su uso puede volverse en tu contra y es posible que acabes pagando lo mismo o incluso más en tu factura de la luz frente a la posibilidad de utilizar el sistema de calefacción central de tu hogar.  En lugar de afirmar que “la calefacción de gas es más barata”, vamos a mostrarte cómo puedes calcular cuál será el sistema más efectivo para tu hogar en función del tiempo que pases en ella y de las horas en las que estés utilizando cada dispositivo. 

Gas frente a electricidad: ¿qué sistema resulta más caro?

Para simular los cálculos, hemos supuesto que la casa cuenta con un sistema de calefacción central por gas. La mayoría de los hogares de España (al menos en las grandes ciudades) disponen de este sistema de caldera que distribuye el calor por toda la casa. Lo primero que debemos tener en cuenta es que el coste del gas es actualmente mucho más barato que el derivado de usar aparatos eléctricos. Si revisas tus facturas de energía, podrás comparar el precio unitario de ambos.  La unidad suele mostrarse en kilovatios-hora (kWh). Aquí está el precio medio de la luz y gas que hemos tenido en España a lo largo de las primeras semanas del mes de diciembre de 2022, lo cual nos servirá como ejemplo: 

Electricidad: 0,16729 € por kWhGas: 0,0636 € por kWh

Como puede apreciarse, el coste del gas supone casi un tercio menos frente al precio de la electricidad. Y aunque las cifras pueden variar según tengas tarifa fija o regulada, las proporciones de gasto serán muy similares.

¿Cuánto cuesta utilizar el calefactor eléctrico?

Si tenemos en cuenta las cifras anteriores, podemos calcular lo que pagaríamos por una hora usando el calefactor eléctrico. Para el ejemplo hemos tomado el modelo Princess Glass de 1.500 W de potencia, aunque lo puedes encontrar también en 1.000 y 2.000 W.  Con el fin de obtener el cálculo del coste más preciso, hemos empleado un medidor de energía que nos ha permitido controlar el gasto energético que realiza el calefactor durante una hora de uso.  Como sabrás, existen calculadoras online que nos permiten obtener el cálculo rápidamente. No obstante, si lo prefieres hacer manualmente, tan solo debes seguir la siguiente fórmula:  Potencia del calentador x Precio de la electricidad = Coste de funcionamiento por hora  Dado que el modelo que tenemos entre manos es de 1.500 W (1 kWh), el cálculo debe ser de 1,5 x 0,16729 kWh, lo que nos deja un valor de 0,25 céntimos de euro por hora de funcionamiento.  No parece un gasto excesivo, y si sumamos las horas que podría estar funcionando, la cifra se eleva. Por ejemplo, con una hora de uso diaria nos sale un consumo mensual de 45 kWh, con lo que el gasto a final de mes que nos repercute en la factura sería de 7,53 €. 

¿Cuánto cuesta el funcionamiento de una caldera?

El siguiente paso es averiguar cuánto cuesta el funcionamiento de la caldera. Esto es relativamente sencillo. Es posible que puedas encontrar el dato en la propia caldera, o quizás debas buscar la marca y el modelo en la red.  Mi caldera es una Roca RS 20 / 20F de 7 kW, lo que significa que usa alrededor de 7 kW de energía por hora. Según mi tarifa de gas indicada anteriormente de 0,0636 € por kWh, el coste de gas que me supone una hora de encendido de la caldera asciende a 0,04 €, con lo que la cifra es muy inferior.  Evidentemente el gasto es relativo, puesto que hay otros aspectos a tener en cuenta, como puede ser el tamaño del piso o casa, el número de radiadores a calentar, así como la temperatura fijada en el termostato que queremos que mantenga la caldera en casa.  Es evidente que la caldera de gas, en época invernal, estará encendida durante un mayor número de horas de lo que pueda llegar a estar un calefactor eléctrico, pero el consumo de gasto parece muy inferior.  La calefacción central de gas también tiene la ventaja de que tendrás caliente toda la casa frente al uso del calefactor que tan solo actúa en la estancia o habitación donde lo tengas funcionando. 

¿Calefacción central o calefactor eléctrico?

Según las cifras anteriores, para mí, usar mi sistema de calefacción central me cuesta alrededor de dos veces y media más que un calefactor enchufable. Pero el dispositivo enchufable solo calentará un área pequeña y el calor se disipará rápidamente. Lo que debe quedar claro es que para calentar toda mi casa, la calefacción central de gas es una opción mucho más rentable que usar calefactores eléctricos repartidos por diferentes estancias de la casa. La opción más económica dependerá de cuántas personas haya en casa y dónde se encuentren. Si estás solo en casa, o toda la familia está en una habitación, puede ser más económico dejar la calefacción central apagada y usar un calefactor enchufable puntualmente. Haz algunos cálculos y lo descubrirás por ti mismo. 

Consejos para ahorrar dinero en la calefacción del hogar

Purga tus radiadores

Para que el sistema de calefacción de su hogar sea lo más eficiente posible, debe purgar los radiadores para eliminar las bolsas de aire. Le costará menos y mantendrá su hogar más cálido. 

Coloca láminas de material reflectante detrás de los radiadores

Aleja los muebles del frontal de los radiadores

No permitas que ningún mueble toque el radiador, ya que absorberá parte del calor. Siempre que sea posible, aleja los muebles para que no bloqueen la salida del calor. 

Apaga los radiadores en las habitaciones que no estés

Enciende solo los radiadores de las habitaciones en las que hagas vida. Asegúrate de que los radiadores de los dormitorios vacíos o de un comedor que no se utilicen, estén apagados. 

Invierte en válvulas inteligentes

Si inviertes en válvulas de radiador inteligentes, no tendrás que encender y apagar los radiadores manualmente. Podrás programar la calefacción para que se encienda y apague a determinadas horas del día, para que nunca desperdicies calor.  También podrás cambiar la temperatura desde tu teléfono, estés donde estés. Algunas de estas válvulas termostáticas de radiador (TRV) inteligentes tienen una pantalla digital que muestra la temperatura, para que puedas verla y configurarla con más precisión.  Muchas de ellas son compatibles con Alexa o Google Home, por lo que puedes usar comandos de voz para activarlas o cambiar la temperatura fácilmente.  La principal desventaja es que no son precisamente baratas si adquieres varias unidades, partiendo de los 40 € aproximadamente. Marcas reconocidas como Netatmo disponen de diversas modalidades de válvulas inteligentes.  En el caso de que seas usuario de iPhone, hay una opción aún más económica que te recomendamos por su relación de calidad y precio. El termostato inteligente Eve es uno de los mejores, no necesita hub o puente y es fácil de instalar y poner en marcha.  Si buscas un sistema completo para optimizar tu sistema de calefacción central, echa un vistazo a nuestro ranking de los mejores termostatos inteligentes que han pasado por nuestras manos.  Alfonso lleva más de 20 años escribiendo y analizando productos de tecnología de consumo. Formó parte de la revista impresa PCWorld y, años después, se enorgullece de seguir siendo crítico en las reviews de productos que realiza.